DISCIPLINA DE LOS ARCONTES GUARDIANES

 

LOS CINCO ARCONTES GUARDIANES

Los “5” guardianes cósmicos son llamados de “Arcontes” por la V.M. Jesus en la “Pistis Sophia”. Estos son seres de luz quy se desarrollan para cumplir determinadas misiones en nuestro planeta dento del tiempo espacial.

Como dioses son los regentes del “Pentagrama de los guardianes”: Cronos, Ares, Hermes, Afrodita y Zeus.

Estos, por su parte, pertencem al rayo positivo de Saturno, Marte, Mercúrio, Venus y Júpiter.

Así como tenemos los “Arcontes” en el macrocosmos, también tenemos estos “5” seres en el microcosmos, como arquétipos de un claro propósito u objetivo a ser alcanzado por todos que buscan una revolución en sus vidas.

Ciertamente que el ser humano como arquétipo de la estrella de cinco puntas, indica dentro de la “rueda vitruviana”, que posee también “5” sentidos, que deben llevarlo a la “5” direcciones comunes, de donde emanam los “5” centros...

Cada “Arconte” es también un ángel y son en verdad el mismo arquétipo de los “7” regentes, sin embargo dentro de otro contexto de influencias:

Júpiter-Zeus. Representa la primera fuerza, la fuerza del Padre Interno y la verdad .

Saturno-Cronos. El destino o el camino (tercer factor- Cristo).

Marte-Ares. El Espíritu-Santo, la vida y el sexo.

Venus-Afrodita. El amor, la unión y también el símbolo de Lúcifer hecho luz.

Mercúrio-Hermes. La gana, el movimiento y la sabiduría .

La Luna y el Sol rigen el tiempo , el destino, los fenómenos naturales y trabajan junto a la Saturno-Cronos.

LAS SEMILLAS CÓSMICAS

Los Arcontes guardianes cumplieron importante papel cósmico, de forma extraordinaria, a través de las influencias de los “5” planetas el año de 2016 . Desde esta época agregaron a nuestros trabajos “5” poderes para plantar las semillas de nuestro trabajo gnóstico.

Estos “5” poderes dentro de nosotros nos dieron una didáctica de base , para el início de cualquiera trabajo o cambio esotérico al cual nos proponemos en nuestras vidas.

La “Disciplina de los Arcontes Guardianes” son semillas que deben ser plantadas como práctica gnóstica que crean una quíntupla fuerza de protección contra las tormentas de la vida y todo tipo de ataques externos y ajenos nuestra propia voluntad.

Dependemos de las influencias de estos dioses o planetas y sus características, para el nacimiento, cultivo, la mejora y futura cosecha de los frutos de este trabajo.

Obviamente que en el contexto general se trata de un arquétipo que tiene como síntesis toda la disciplina entregada por los maestros, de una forma organizada y dentro de técnicas que nos permitan comprender mejor las diferentes influencias de nuestro cuerpo físico, de cara a los horarios y tiempo biológico el cual somos regidos o sometidos.

Se hace imposible querer coger frutos de este trabajo gnóstico, si antes no plantamos, cuidamos y “regamos” las semillas que podrán llevar al equilibrio de nuestros “5” centros de la máquina humana, pues, este es el primer paso para hacernos verdaderos discípulos en la Gnosis...

Paz Inverencial!

Fuente: S.O.S.