LOS DOS MAYORES MANDAMIENTOS
"La desintegración de los defectos y el desdoblamiento astral son las ÚNICAS FÓRMULAS que hay para el rescate."
Hercólubus o Planeta Rojo (Ago de 1998) - V.M. Rabolú
"Trabaje... sin dejar un momento de estar dando duro con la muerte y con el desdoblamiento en astral. Aquel que trabaja con esas dos cosas, de forma seria, será rescatado... no fracasará, no lo dejaran fracasar.
Este fue el último que pude encontrar en el interno, como salvación del estudiante gnóstico."
Carta Respuesta (30/12/1998) - V.M. Rabolú
Estamos, pues, viviendo un ciclo de oportunidades donde puertas y caminos se abren para que entremos y seguimos adelante con nuestros propósitos gnósticos transcendentales.
CREER SIN SABER ES CONFIAR SIN VER, YA LA FE NOS DA EL PODER DEL RELIGARE Y DE LA MÍSTICA SUPERIOR, POR EL CONOCIMIENTO DE LA VERDAD, DE DIOS Y DEL AMOR.
Necesitamos urgentemente buscar acercarnos de nuestro Íntimo y de todas las partes elevadas de nuestro Dios interior.
Debemos desapegarnos de la materia, de nuestra vida racional, de nuestras ambiciones o de todo aquello que se hará polvo un día y que no forma parte de nuestra existencia real...
Comprender la propia nulidad y falta de importancia como mero animal intelectual o pobre máquina transformadora de energía, es un ejercicio que a veces tenemos que hacer para salir del pedestal, del alto de donde miramos los otros como ignorantes e insignificantes...
El orgullo, el amor-propio, la arrogancia y la altivez son característicos de alguien que vive en las tinieblas del ego de la ceguera.
El ego de la ceguera no sólo nos lleva la pasión por un ídolo, un ideal, un político, una religión... etc. como también puede crear una adoración por sí mismo.
Desmontar las falsas estructuras las cuales nos apoyamos y nos sostenemos para parecer fuertes, buenos y sabios delante de todos, es posible cuando estudiamos la formación de nuestra personalidad...
Comúnmente oímos frases como esta - tengo orgullo de mi hijo o hija... (tal vez porque haya pasado en una selectividad, conseguido un diploma o subido de cargo en la empresa... etc) - Pero, si el orgullo viene del ego, donde está nuestro verdadero sentimiento? Mejor sería que sintiéramos preocupación, por no saber hasta que punto el intelectualismo de la Universidad y ambición en el trabajo va a afectarlo al hacerlo cada vez más escéptico y materialista.
En el mundo actual los casos de suicidios viene aumentando asustadoramente. Esto se debe la falta de fe, de Dios y de amor verdadero, vuelto al alma, no la personalidad. Los jóvenes de hoy tienen una ansiedad extrema y un vacío interior y esto les quita la gana de vivir...
El PRIMER MANDAMIENTO
(Muerte de los detalles)
"Porque, se encontró una monedita por ahí, la gente la agarró... Bien, ese es un detalle. Así, cosas insignificantes, que no se cree que sea prueba. Esos son los detalles. Entonces, si comenzamos por ahí, el ego va muriendo. Se va desnutriendo y va muriendo. Eso es inevitable!
Esa es la muerte verdadera y yo la conocí profundamente; porque, como lo enseñó el Maestro, no es que yo quiera saber más, porque, como yo les digo, él habló de morir de instante en instante, de momento en momento y esto está relacionado con los detalles."
El Águila Rebelde - V.M. Rabolú
Morir de instante a instante, de momento a momento, significa que tenemos que estar en estado de alerta, vigilantes, para combatir todos los nuestros actos, pensamientos, sentimientos y palabras que posiblemente nos puedan perjudicar y/o perjudicar otros.
Eliminar detalles del ego o quitar su alimento, muchas veces, representa solamente cambiar un hábito, sea en la forma de hablar, expresarse o actuar.
Dentro de este contexto debemos entender que hay dos tipos de detalles o alimentos de los egos:
1- Exterior (Comportamiento, desatención y hábitos)
2- Interior (Reacción, defectos y negatividad)
Obviamente que nadie irá a pedir la muerte de sus defectos, a la Madre Divina, de momento a momento, porque eso además de ser casi imposible se haría algo totalmente mecánico y sin efecto.
La muerte en este caso ocurre por el cambio de comportamiento, por la vigilancia constante de nuestros actos, para evitar que se diga algún palabrón, que se ría con algún chiste con doble sentido, que juzguemos alguien o critiquemos sin que nos autorizaran, que se ofenda al prójimo, que nos quedamos con el cambio extra que nos dan por error, que robemos la vacante de otro auto en el aparcamiento, que cortemos la cola tomando el lugar de otros, que seamos mal-educados y no saludemos a nadie, que seamos mal-humorados y repercutimos en el otro, que lancemos elogios a una mujer en la calle, que estemos identificados con las redes sociales y discusiones de los grupos y miles de otros detalles...
En estas situaciones de actos que cometemos por desatención o mal hábito, el trabajo es de transformación de las impresiones y estas una vez transformadas dejan de ser alimentos para nuestros egos, por lo tanto forman parte de nuestro proceso de morir.
Este trabajo es también el mismo de las pruebas que todo estudiante pasa en el camino para llegarse a la iniciación. Por eso el maestro Rabolú dijo que no sabía que eso era la muerte, porque en este caso no entra el pedido instantáneo a la Madre.
Es decir lo que podemos llamar de “muerte mística”, porque el papel de la Madre Divina en estos casos, es también místico, en el sentido de la oración que hacemos a ella antes de comenzar nuestro día. Pedimos con nuestras palabras de forma simple, que ella ayúdenos a eliminar todos estos detalles exteriores a nosotros, durante el transcurrir de nuestro día.
Ya en la “muerte revolucionaria” se exige que la Madre y empuñe su lanza y actúe en el mismo instante del defecto descubierto. En este caso es un trabajo más interno, sobre nuestras reacciones de los centros, como pensamientos, emociones e instintos.
Al contrario de la muerte a todo instante, este trabajo entra en momentos específicos durante nuestra convivencia, profesional, social o familiar. Son situaciones que exigen mucha auto-observación porque generalmente son alimentos con más substancias, diremos así.
De cualquier forma aún son detalles y no el “Ego” como una bestia feroz que vamos a enfrentar cara a cara, como machos o superhombres.
En este caso la gente no necesita decir una palabra o mover un dedo para nada, pues, todo acontece dentro de nuestro mundo interior. Incluso porque en la actualidad todo puede acontecer en el frente de una pantalla de un Smartphone.
LA PRÁCTICA 1
Acción y reacción (ejemplos):
Alguien dice algo que nos disgusta (acción) - Nuestra reacción: Centro emocional - Orgullo o amor-propio herido. Enseguida Intelectual - pensamientos negativos y charla contra la persona... Que tonto, que imbécil... no sabe nada etc. etc. Trabajo: Mi madre desintegra este defecto! (con fuerza en pedido).
Vamos a salir a la calle, al Centro comercial, etc. - En el caso de los hombres: El “centinela” ya debe estar en alerta en centro sexual. Nuestra reacción: Sexual - Se identifica con el cuerpo de la mujer, su belleza, etc... Emocional - Corazón acelera. Intelecto - Que linda, que delicia... que maravillosa... En el caso de las mujeres: La reacción puede quedar más en el centro intelectual, en la esfera de los pensamientos e imaginación. Trabajo: Primero consideramos que el “mirar” fue sin intención e inevitable, pues, al contrario debemos desviar nuestra atención. En los dos casos observamos el “ego” actuando y hacemos el pedido - Mi madre desintegra este defecto!
En síntesis este es el trabajo con el “primer mandamiento”, la muerte de los detalles, sea de forma mística o revolucionaria.
El SEGUNDO MANDAMIENTO
(Desdoblamiento en astral)
Importa a nosotros entender de entrada la diferencia entre una “experiencia” y un “desdoblamiento”.
Cuando despertamos la conciencia durante un sueño, vivimos una experiencia, donde nos damos cuenta que estamos en el astral y podemos interaccionar con nuestro entorno. Ocurre que este choque deja la mente confusa, porque a la vez que tenemos la sensación que estamos en el mundo físico, sabemos que el cuerpo duerme en la cama. Para la mente existe el estado de sueño (durmiendo) y el estado de vigilia (despierto), cuando estos dos estados confunden sus mundos, si no haber una concentración extrema y un olvido completo del mundo físico, la mente hará de todo para que la gente pueda despertar... por temor al desconocido o poco rutinario.
Ya cuando nos desdoblamos de la cama y seguimos en astral, despiertos, la mente entiende como un proceso más natural, que hacemos todas las noches no se presta tanta atención al hecho de estarnos despiertos. Pero, si quedáramos eufóricos o con miedo, acabamos retornando al cuerpo. Ya si lograrnos éxito, el hábito hará que cada vez pasemos más tiempo en el mundo astral y también permitirá que podamos desdoblamos siempre queramos, de día o noche y en cualquiera horario.
De la misma forma que el trabajo con los detalles, el desdoblamiento o experiencia en el astral, posee dos aspectos:
1- Exterior (Disciplina de la agenda diaria, no identificación)
2- Interior (Voluntad, concentración y determinación)
Resulta lógico y evidente que el trabajo del despertar en el astral o desdoblamiento, comienza en el mundo físico o mundo exterior.
Si dejamos nuestro día corra suelto, sin atención y sin una disciplina que nos permita tener concentración en todas nuestras actividades, ciertamente estaremos identificados y comúnmente caeremos en sueño profundo.
Vivir identificado con todo, con todos o con nosotros mismos, sea en la pantalla de un Smartphone, Televisión o vida real, significa gastar todo el “aceite” de la lámpara y no sobrar nada para la práctica de la noche.
La lámpara es el alma, la Esencia y el aceite la conciencia libre que poseemos. La Madre Divina es la “virgen” que cuida de nuestra lámpara. Cuando somos prudentes, nos acercamos de ella, trabajamos bajo su protección y revolución, así ella cela por nosotros y mantiene la lámpara siempre aprovisionada con aceite.
Cuando no hacemos caso, no oramos, no pedimos su orientación, ni la muerte de ningún detalle... nada, nuestra Virgen Madre, no puede ayudarnos y así, nos olvidamos de cuidar del aceite... y la llama se apaga.
En otras palabras diríamos que tanto para la muerte de los detalles, cuanto para el desdoblamiento, la base de nuestro trabajo será siempre en el mundo físico.
Ya el aspecto interno, es cuando la noche, vamos a volvernos para dentro de nosotros mismos y llevar la atención y concentración para la práctica en sí, que debe llevarnos al desdoblamiento.
Cuando tenemos dificultades en concentrar e imaginar, debemos practicar en la madrugada, cuando el cuerpo ya repuso sus energías.
Así, de a poco vamos dándonos cuenta que el cumplimiento de los “dos mandamientos” del rescate final, se relaciona uno con otro y ambos son tan místicos, cuánto revolucionarios. Podemos decir aunque el triunfo final de estos trabajos nos dará como premio la “corona de la vida”, que es la conquista de los mundos internos por el desdoblamiento y por nuestro despertar a través del trabajo de auto-observación y muerte diaria.
LA PRÁCTICA 2
"Estoy diciéndoles eso aunque yo tengo la concentración como un hecho real.
Salgo de mi cuerpo a la voluntad, sin ningún mantra, relajo bien mi cuerpo, me concentro en mi corazón y espero que venga el desprendimiento del cuerpo astral, y salgo por la glándula pineal a la voluntad. Únicamente con la concentración. La concentración es un poder terrible."
Ciencia Gnóstica - V.M. Rabolú
Sabemos que existen decenas de mantras para la salida en astral. Hasta sugerimos uno u otro, a veces, por cuenta de alguna influencia especial, pero, hay siempre el riesgo de estar creando algún tipo de conflicto, porque alguien puede no gustar del mantra sugerido y no sabe si hace lo que está acostumbrado o lo que fue indicado...
En verdad lo que realmente hace la diferencia en la práctica del desdoblamiento es la concentración. De modo que los mantras entran como un medio para mantener nuestra atención solamente, ya que sus poderes no surten efecto sin la concentración.
En este caso, usar la técnica enseñada por el maestro Rabolu, de concentración en el corazón nos parece de más indicada...
Además, podemos y debemos volvernos al corazón e imaginar nuestra Divina Madre allí en su templo interno y orar a ella pidiendo por nuestro desdoblamiento...
"Madre mía, yo te pido, yo te suplico en nombre de Cristo, por la fe que tengo en la Iglesia Gnóstica y por el poder de la Logia Blanca: Sácame de mi cuerpo!"
Adormecemos repitiendo esta oración muchísimas veces y concentrados en el corazón... en cuanto empezamos a desdoblarnos, nos levantamos de la cama, flotamos y seguimos por el mundo astral al encuentro de los “Dos Testigos”.
Esta práctica, la haremos al acostarnos, durante la madrugada y a cualquier hora durante la noche...
Paz Inverencial!
Fuente: S.O.S
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