EL INICIO
Nuestra lucha por despertar la conciencia debe ser continua, día a día, momento a momento, no podemos seguir siendo tibios, pues como dice el VM. Rabolú "el Tiempo del Fin se acerca a pasos agigantados".
Para comenzar concretamente el trabajo sobre nosotros mismos tenemos que estudiar cómo auto-observarnos; leer y releer toda la orientación sobre cómo desintegrar los defectos.
La disciplina para entrar en la iniciación es trabajar en los detalles, pues cuanto más morimos de instante en instante más debilitamos el ego, por lo que nuestra conciencia actuará cada vez más. A medida que avanzamos en la muerte de los defectos que en conjunto forman el Ego, estamos dejando espacio para que la Sabiduría se exprese y así estamos ayudando verdaderamente a la humanidad. De este modo, también nos beneficiamos a nosotros mismos para superar las pruebas de iniciación que las jerarquías someten a todo estudiante gnóstico.
Así pues, el primer choque consciente que se produce en el trabajo interior es el Recuerdo de sí mismo. Recordar que no somos esas imperfecciones que se manifiestan en un momento determinado. Qué en verdad, somos algo muy superior a esto (lo íntimo). Es este recuerdo de Nosotros mismos el que permitirá que nuestra Esencia se active, de manera que no permita que nuestra conciencia se duerma o quede hipnotizada.
Como sabemos, la muerte de los defectos junto con el desdoblamiento astral consciente nos dará la oportunidad de ser rescatados.
"La desintegración de los defectos y el desdoblamiento astral son las ÚNICAS FÓRMULAS que existen para el rescate". (Hercólubus o Planeta Rojo - V.M. Rabolú)
El segundo aspecto a trabajar en los detalles es la auto-observación. Para que se produzca la auto-observación, es necesario que haya una división en dos, a nivel interno (psicológico), que es el Observador (Esencia) y lo Observado (Defectos).
La auto-observación debe realizarse en los tres centros: mente, corazón y sexo, para conocernos a nosotros mismos y aplicar la muerte en marcha, siempre con la ayuda de nuestra Madre Divina.
Práctica: A cada manifestación diminuta, a cada pensamiento que a veces no nos importa, que se piensa que es un defecto, pedimos inmediatamente, sin esperar a mañana o pasado mañana: "¡Madre Divina, desintegra este defecto!"
"Pregunta: Es decir, que cada pensamiento sutil que nos llega, ¿es un detalle?
Respuesta: Un detalle que tenemos que pasar una vez y pedirle a la Madre Divina que lo desintegre. Todas estas pequeñas cosas que crees que no son nada, sí lo son, porque son alimento para el ego, son el alimento del ego." (El Águila Rebelde - V.M. Rabolú)
La disciplina debe considerarse fundamental en nuestra vida. El VM. Rabolú nos enseñó en su libro El Águila Rebelde que, anotando todas nuestras actividades diarias en una agenda y haciendo primero una actividad sin pensar en la siguiente, es decir, haciéndola de una en una, poniendo nuestra atención en el momento, mejoraremos nuestra concentración y cuando vayamos a hacer una práctica esotérica tendremos éxito.
Lamentablemente estamos fallando mucho en este aspecto, hoy en día estamos muy dispersos con todas las cosas de nuestra vida, hay muchas distracciones hoy en día, finalmente no estamos presentes en el aquí y ahora.
Debemos empezar a practicar urgentemente, porque no basta con conocer estas enseñanzas. Debemos pedir diariamente ayuda a nuestro interior, a nuestro Padre, a nuestra Madre Divina, sólo así avanzaremos y tendremos éxito.
Cada uno debe trazar individualmente su propia disciplina, porque nadie hará este trabajo por nosotros.
Los maestros también nos han enseñado los mantras para ayudarnos en el desdoblamiento astral; o incluso la concentración en nuestro corazón; elegimos una forma e inmediatamente empezamos a practicar.
La puerta del Nirvana
La meta de todo estudiante gnóstico es la autorrealización o el despertar total de la conciencia. Es como si tuviéramos que cruzar un puente para encontrar al otro lado una olla de oro, que es la corona de la vida, que nos sacará del ciclo de muerte y nacimiento.
La Puerta del Nirvana es una oportunidad que venimos recibiendo de las Jerarquías Divinas desde principios del siglo XX para impulsar nuestro despertar. Porque una persona con un 10%, 20%, 30% de conciencia, aunque no vaya a la isla del éxodo, ¡puede ser dirigida a un lugar seguro para ir despertando hasta que alcance el 50% de conciencia! ¡O subimos o bajamos, porque, por otro lado, también se han abierto las puertas del abismo y con ello, pesadas influencias provenientes de las infradimensiones que nos succionarán con toda su fuerza, si no estamos en el recuerdo de nosotros mismos y muriendo de un momento a momento!
Muchas veces queremos adaptar este trabajo a nuestra vida, pero la verdad es que tenemos que adaptar nuestra vida a este trabajo y esto es posible, cuando cambiamos la forma de pensar, ver, sentir y consecuentemente actuar.
Como ya se ha dicho, ¡la disciplina es fundamental para este trabajo! Cuando hablamos de disciplina podemos pensar en algo duro, rígido... Sin embargo, cuando sentimos los beneficios de los momentos en que el Real Ser está al mando de la máquina humana, ya sea en el recuerdo de nosotros mismos, en un desdoblamiento astral o en una meditación, ¡la disciplina se vuelve placentera! ¡Dura y difícil es la vida con tantos egos aprisionándonos, generando ansiedad, miedo, dolor y angustia!
Hagamos un ejercicio de conciencia sobre nosotros mismos en relación con este trabajo: imaginemos que nos tomamos un fin de semana, o un día entero para hacer prácticas, para estar en conexión con la naturaleza, con nuestro Real Ser, totalmente desconectados de las redes sociales... ¿Cuál es el sentimiento que nos invade? ¿Creemos que es una buena idea, o nos inventamos mil excusas? ¿Nos gusta este trabajo?
¡Aunque todavía no seamos capaces de sentir el "sabor" del trabajo, no es ni mucho menos un caso perdido, porque para eso estamos juntos en este grupo, para compartir experiencias y formas de hacer el camino aún mejor!
Para alcanzar una meta u objetivo, necesitamos saber a dónde queremos llegar, qué tenemos que hacer para conseguirlo y, además, necesitamos saber en qué punto del camino nos encontramos, nuestro punto de partida. Para ello necesitamos hacer un análisis sincero de nosotros mismos, a través de la reflexión, la autoobservación y la meditación.
Como sugerencia podemos hacer este ejercicio:
1 - ¿Dónde estamos en este camino?
Ejemplos:
- No me acuerdo de mí mismo
- No puedo observarme a mí mismo
- Puedo observarme a mí mismo, pero sólo durante unos minutos
- Puedo observarme, pero me olvido de pedir la eliminación del defecto
- Puedo observarme y pedir la eliminación, pero no puedo salir en el astral
- Puedo salir en astral, pero no puedo meditar
2 - ¿A dónde queremos llegar?
Ejemplos:
- Para aquellos que no pueden recordar de sí mismo, el objetivo es desarrollar el Recuerdo de Sí.
- Para aquellos que no pueden observarse a sí mismos, el objetivo es desarrollar la auto-observación;
- Para los que todavía no pueden concentrarse, un objetivo sería desarrollar la concentración;
- Para aquellos que todavía no tienen el gusto por la práctica, un objetivo sería desarrollar el gusto por la práctica;
3 - ¿Cómo hacerlo?
- Si no puedo observar mis pensamientos y sentimientos, al principio puedo observar mis acciones, lo que digo, hacia dónde miro, si tenso la mandíbula, si me siento recto en la silla (porque si no me siento, me puede doler la espalda)
- Si no puedo observar durante mucho tiempo, una forma de trabajar en esto podría ser crear pequeños objetivos durante el día.
Ejemplo: me observaré desde el salón hasta la cocina, me observaré mientras toco esta canción, me observaré mientras limpio la habitación, me observaré mientras veo este vídeo...
¡De esta manera, iremos trazando una estrategia para vivir cada vez más los beneficios de este trabajo!
Paz Inverencial!
*Colaboración: hermanos gnósticos del S.O.S.
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