LAS REPRESENTACIONES DE LA MENTE

“...Porque tenemos que tener en nuestra Mente cosas que no son del SER? No veo porque tenemos que cargar en nuestra mente intrusos. Comprendí que en la Mente sólo debe estar el SER, que la Mente debe convertirse en un Templo donde oficie el SER y nada más que el SER, eso es todo”. (Samael Aun Weor)

En el camino que estamos recorriendo para el despertar de la Conciencia, no solamente tenemos que eliminar dentro de nosotros los defectos psicológicos, como también un aspecto muy sutil de nuestra Mente. Se trata de las Representaciones Mentales.

Los Agregados Psicológicos difieren de las Representaciones de la Mente, porque cada defecto psicológico tiene un porcentaje de ESENCIA enfrascada, ya las Representaciones Mentales no, sin embargo, ellas se hacen un gran obstáculo para nuestro crecimiento espiritual, porque esas formas mentales ocupan el espacio de nuestra mente y alimentan esa legión de Yoes que adormece nuestra Conciencia. Las Representaciones de la Mente pueden ser tanto negativas cómo positivas. Por ejemplo: en la calle, en una vitrina, vemos un vestido lindo o, en casa, en el frente de la televisión, una novela con escenas lujuriosas, pasamos a mirar esta escena, identificándonos con la misma (no transformando las impresiones).

El resultado es la creación de nuevas Representaciones. En el caso del vestido bonito, cuya imagen (representación) no sale de la memoria, alimentando el defecto de la vanidad o de la codicia, ya en las escenas de la novela, se forma en el mundo de la Mente un personaje masculino o femenino, relacionado al yo de la lujúria. Entonces, los Defectos Psicológicos astutamente utilizan de esta fascinación que tuvimos al crear esas representaciones, que quedaron allí almacenadas (mente). Así, al hacerse una práctica, aquellas formas mentales quedarán “martillando” en la mente, impidiendo de concentrarnos y, en ese estado, perdemos la práctica. A la noche, en el mundo de los sueños, esas Efigies o Representaciones Mentales también irán a manifestarse, de ahí el porqué de términos sueños tan incoherentes, difusos o inconscientes. Esto se debe al hecho de que, durante el día estemos sin foco (Conciencia adormecida), con la mente desorganizada (fascinada) e identificada con las cosas del mundo físico. El Maestro Samael habla que las Representaciones Mentales o Efigies son como pájaros de mal agüero en la jaula de la mente, que sirven para fortificar nuestros defectos psicológicos.

Dentro de la mente existen miles de representaciones negativas o positivas que pueden ser alteradas si, por falta de estar vigilantes y en Recordación de nosotros mismos día a día, nos envolvemos en conversaciones del tipo lujuriosas , calumnias o dice que dice (murmuraciones). Ejemplo: tenemos un amigo (a) por quien tenemos consideración y aprecio. Llega alguien y habla una serie de cosas negativas a su respeto. Si no estuviéramos atentos (Esencia activa) y damos oídos a esas calumnias, la imagen de esa persona a quien admiramos queda alterada, es decir, creamos una representación mental negativa acerca de la misma. Puede hasta ser que esa persona haya sido calumniada injustamente, pero la imagen, la representación que teníamos de ella quedó distorsionada negativamente, no la vemos más como una persona idónea, honesta y íntegra, pasamos a verla en consonancia con lo que nos contaron, posiblemente la de un bandido, adúltero, traidor, etc. Llegando al punto de la noche en el astral seamos hostiles y hasta llegar a agresiones y peleas con ese amigo(a). En virtud de la representación mental que fue alterada (positiva a negativa) que pasamos a tener acerca de él (a).

Estando en vigilia, de instante a instante y de momento a momento, (auto-observación), podemos percibir como las representaciones de la mente alimentan los defectos psicológicos (Ego). En esa condición, tenemos la posibilidad de vigilar no sólo nuestros sentimientos, emociones, deseos, pero también esas Representaciones mentales o Efígies que están ocupando nuestra mente. Y ahí sí, en ese momento debemos apelar nuestra Madre Divina para que incinere toda esa basura o suciedad, que ocupa el espacio psicológico dentro de nosotros y crea un obstáculo para el trabajo interno. Pedimos la Madre Divina que utilice su lanza flamígera así como también se hace con la Muerte en Marcha, para que la Esencia vuelva a brillar en nosotros.

Si no elimináramos esas representaciones, ellas irán a fortificar más y más los Agregados Psicológicos. Tenemos que dar un basta. Es urgente que despertemos nuestra Conciencia en los mundos Internos. No tenemos otra salida para despertar, a no ser trabajar duro con la MUERTE DE INSTANTE A INSTANTE, para eliminar esos aspectos negativos que están en nuestra mente.

Debemos mantener la Mente receptiva, para tal condición , la misma debe estar limpia, serena como un lago tranquilo y cristalino, sin proyecciones y pre-juicios de ninguna especie, a fin de que los mensajes que viene de lo Alto, de las partículas de nuestro SER lleguen hasta nosotros, a través de los Centros Mental y Emocional Superior. La Mente no debe proyectar, juzgar, conceptuar. No debemos criticar o hablar de nadie ni bien, ni mal, pues cada uno es cómo es. Es mejor respetar la vida del otro y no abrir las puertas para las impresiones negativas. Las representaciones de la mente se forma a partir de la no transformación de las impresiones, tema a ser abordado más adelante.

Si nos proponemos a trabajar sinceramente, de instante a instante para eliminar esos aspectos negativos de la mente con la Muerte, vamos liberando el porcentaje de Esencia enfrascada en los defectos (Ego) y, en consecuencia, vamos adquiriendo progresivamente, más discernimento y lucidez (LUZ) en los mundos Internos. A partir de ahí vamos siendo auxiliados internamente por las Jerarquías e irá naciendo algo nuevo: nuestra transformación interior.

El objetivo de todo el estudiante del esoterismo es abrir un canal para que la luz que viene del alto ilumine su Templo.

“Antes que a llama de oro pueda arder como luz serena, la lampara debe estar bien cuidada, al abrigo de todo viento, los pensamientos terrenos deben caer muertos en la puerta del Templo...”. (H. P. Blavatski)

LA MENTE A SERVICIO DEL SER

Debemos cultivar nuestros hábitos día a día , que alimenten nuestra Alma, nuestra Esencia que son partículas del SER:

- Oír músicas superiores;

- Mirar para el Cielo, para el Sol, para las estrellas;

- Intensificar el trabajo con la muerte de los defectos, así como de las Representaciones mentales;

- Intensificar la prácticas de desdoblamiento y meditación;

- Vigilar nuestra conducta cuanto estamos relacionándonos con las personas evitando conversaciones negativas, intrigas, calumnias, dice que dice, y conversaciones de corte lujurioso etc., sutilmente podemos cambiar el foco de la conversación sin ser malos educados;

- Vigilar la relación que tenemos con los medios comunicacionales (web). Vivimos en un mundo globalizado en que las noticias nos llegan cada instante de cualquier lugar del planeta. Necesitamos aprender a filtrar y extraer lo que nos sirve;

- Cuidar con las noticias falsas (fake news), principalmente los días actuales, delante del escenario político por el cual estamos vivenciando;

- Debemos crear una disciplina en relación al tiempo de uso de las Redes Sociales, evitando que está no los esclavice y cree más impresiones negativas en nuestra mente;

- Huyamos de las novelas y películas que exploran temas de adulterios, traiciones, drogas, incentivo al homosexualismo, terror, violencia y crímenes horrendos, etc, pues son mecanismos que las fuerzas del mal utilizan para esclavizar y adormecer la humanidad. En relación a las películas, el maestro Samael sugería sólo documentales sobre la naturaleza o un tema que explorara algo real o verdadero (sin fantasias).

Paz Inverencial!

*Colaboración: hermanos gnósticos del S.O.S.